Madrid, 17 de enero de 2013.
Casi ocho de cada diez personas encuestadas reclaman la obligatoriedad del casco en vías urbanas. Además, el 97,91% de los consultados consideran necesario la realización de más campañas informativas. La Fundación CEA, que ha llevado a cabo este estudio, pide a las autoridades una pronta regulación de la normativa vigente para el uso de la bicicleta, así como la ampliación y la mejora de la misma.
Según los datos recabados en la encuesta realizada por la Fundación CEA a unas 1.100 personas, el 79,93% de los participantes creen que el casco es un instrumento fundamental para minimizar los riesgos en caso de accidente. La Fundación CEA, en su afán por mejorar la seguridad vial, ha realizado este estudio con el objetivo de analizar la situación del uso de la bicicleta en las ciudades.
Un 97,91% de los participantes en la encuesta creen necesaria la realización de más campañas informativas sobre las obligaciones y derechos de los ciclistas, ya que el 92,83% consideran que, en general, los usuarios no conocen las normas que regulan el uso de las bicicletas en las ciudades.
A pesar de que el 85,01% de los encuestados no utilizan la bicicleta para sus desplazamientos, su uso está en crecimiento en España. Sevilla, con un 6,6% de los desplazamientos diarios en este vehículo, encabeza el ranking; le sigue Valencia con un 4,5% o San Sebastián, Zaragoza y Vitoria con un 3%; a continuación se encuentra Barcelona con un 2%, mientras que Madrid, con un 0,3%, está entre las que menos desplazamientos diarios se realizan con este medio de transporte.
Sin embargo, el 70,56% de nuestros encuestados creen que, en el ámbito de la circulación urbana, la bicicleta no es considerada un vehículo de la misma manera que un automóvil o una motocicleta, y abogan por la seguridad de los ciclistas en las ciudades. Un 79,93% obligarían a los conductores de bicicletas a usar el casco en vías urbanas para evitar riesgos en caso de caída. Por su parte, un 82,03% creen que debería ser obligatorio el uso de prendas reflectantes en vías urbanas para mejorar la visibilidad.
También en materia de seguridad, un 67,14% de los participantes en la encuesta consideran inseguros los sistemas de retención infantil implementados en estos vehículos de dos ruedas sin motor.
La normativa que regula el uso urbano de la bicicleta
En el Reglamento General de Circulación se regula el uso de la bicicleta en un articulado concreto, pero disperso. Es por ello que la Fundación CEA exige una pronta regulación sobre el uso de estos vehículos y la estandarización de las normativas municipales. En la actualidad, la normativa que afecta a los ciclistas está destinada, principalmente, al uso de la bicicleta en vías interurbanas, por lo que es necesaria su actualización.
La convivencia entre los ciclistas y el resto de usuarios de las vías debe mejorarse. Éste es el motivo por el que los ciudadanos reclaman más campañas de información sobre las normas que afectan a cada actor en las calles de las localidades españolas. Esto cobra mayor importancia analizando los datos de uso de la bici en ciudades, ya que estamos ante un medio de transporte que comienza a cobrar fuerza como consecuencia de la crisis económica y las distintas redes de transporte público instauradas por los ayuntamientos.
Solicitud de la Fundación CEA a las administraciones públicas
La Fundación del Comisariado Europeo del Automóvil cree que, para mejorar la seguridad vial en las ciudades, es necesario incentivar la convivencia entre todos los actores: ciclistas, peatones y conductores. El respeto y el conocimiento de las normas son los pilares fundamentales para el buen funcionamiento del día a día en las calles de nuestros municipios. Por todo ello, la Fundación CEA solicita:
- A la Dirección General de Tráfico (DGT), Ayuntamientos y resto de administraciones, que pongan en marcha campañas informativas sobre las normas por las que se regulan el uso de la bicicleta en vías urbanas. Así mismo, es necesaria la puesta en común de la normativa entre todos los consistorios a través de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) con el asesoramiento de la DGT.
- A los conductores de vehículos a motor, que aumenten la precaución cuando vean un ciclista, moderen la velocidad y establezcan una distancia de seguridad suficiente para evitar un accidente.
- A los ciclistas, que utilicen todos los recursos que hay a su disposición para mejorar la visibilidad en las calles mediante prendas reflectantes. También es importante concienciar a los usuarios en el uso del casco para que, en caso de accidente, reduzcan al máximo el riesgo de lesión. Que respeten las normas de tráfico, como el resto de conductores, así como a los peatones. Y, por último, que revisen el estado mecánico de sus bicicletas y todos los soportes que se añadan como sillas infantiles, cestas, iluminación, etc.
- A los peatones, que conozcan los lugares por los que las bicicletas pueden circular, evitando así cruces innecesarios u ocupaciones de carriles destinados a este medio de transporte. Cuando vean una bici, deben tener cuidado y no realizar movimientos que entorpezcan a los ciclistas, reduciendo así el riesgo de atropello.
Espero que esta información sea de interés para tu medio, y quedo a tu disposición para ampliar información. Un saludo.