El i-Size es una nueva regulación europea de seguridad para los sistemas de retención infantil, por el cual las sillitas tienen que pasar una prueba de choque lateral para ser homologadas. A nivel práctico las sillitas con sistema i-Size únicamente se podrá montar en vehículos con asientos ISOFIX.
Este sistema de homologación europea ha sido calificado en primera posición por su nivel de calidad y seguridad. Además de los países de la Unión Europea, la normativa i-Size es efectiva en otros países.
Por el momento, los actuales conductores de vehículos que lleven instalado otro tipo de sistema de retención infantil no están obligados a reemplazarlos por una sillita para niños con sistema i-Size. Todas las sillas de seguridad infantil a la venta en la actualidad cumplen con los requisitos de seguridad más estrictos y todos los requerimientos legales necesarios para su uso, por lo que pueden seguir utilizándose con plena confianza.
Ventajas del i-Size
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Mejora el montaje de la silla en los asientos del vehículo, haciéndolo mucho más seguro. Este tipo de sillas únicamente se pueden instalar en asientos con sistemas ISOFIX, que ancla la sillita del bebé en tres puntos de sujeción o apoyo.
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El uso de sillas de seguridad infantil en sentido contrario a la marcha pasa a ser obligatorio hasta que el niño cumpla los 15 meses de edad. Puesto que esta orientación de la sillita ofrece una mayor seguridad durante el desplazamiento en coche. En caso de un accidente de tráfico se reduce significativamente se reduce la tensión en el cuello del bebé.
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Facilita la clasificación según el criterio de altura, en lugar de tomar como referencia el peso del niño y la edad. El objetivo de la utilización de un sistema basado en la altura es facilitar al consumidor final la elección de la silla de seguridad infantil más adecuada para el tamaño de su hijo.
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Incorpora una nueva prueba de impacto lateral. Este tipo de impacto es considerablemente más peligroso – a nivel físico – que un impacto frontal, por lo que una sillita de seguridad infantil debe de estar equipada por una protección adecuada que ayude a prevenir las lesiones en un niño en caso de una colisión de este tipo.
Desde el Comisariado Europeo del Automóvil (CEA) queremos hacer hincapié en la responsabilidad que tienen los adultos para que los niños siempre lleven los sistemas de retención infantil con la finalidad de garantizar su seguridad. Los niños aprenden por imitación, por lo cual siempre deben mostrar el ejemplo del uso del cinturón de seguridad.
Rosa M. García Álvarez – Directora de Comunicación de CEA
