La agresividad al volante, es un hecho más común de lo que nos pensamos. Según un estudio de Fundación Línea Directa, podemos ver que el 74% de los españoles admiten haber insultado alguna vez conduciendo, ¡Y un 10% incluso haber llegado a pelearse por una discusión con otro conductor!
¿Y qué nos lleva a ser tan agresivos?
Algunos de los principales causantes son el estrés y la ansiedad, en estas situaciones el conductor no es capaz de actuar con normalidad, pensar de manera sensata y tranquila, simplemente actúa por impulso.
Hay otros muchos factores tales como el calor, la frustración, el alcohol ... que pueden propiciar este tipo de conducta agresiva.
También debemos añadir que es un comportamiento que se da más en cierto tipo de recorridos, como por ejemplo el camino para ir a trabajar. En este caso, las probabilidades de tener un enfrentamiento con otro conductor aumentan.
¿Qué pasa si tengo una conducta agresiva al volante?
Lo más común es que la concentración en la conducción disminuya notablemente, se deja de prestar atención a muchos estímulos de la carretera, nos focalizamos únicamente en lo que nos está molestando. El modo de conducción cambia a intimidante, y se intenta obstaculizar el recorrido de otros vehículos.
Pero sin duda el mayor de los peligros es que podemos causar un accidente de tráfico, puesto que estamos atentando directamente contra la Seguridad Vial. El 0,4% de los conductores españoles asegura haber causado un accidente de tráfico con víctimas.
¿Está penalizada la actitud agresiva al volante?
La respuesta es sí. Las multas pueden variar dependiendo de la temeridad de las infracciones. Distinguimos algunos ejemplos:
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Adelantar sin dejar espacio respecto a otro vehículo: 200 euros de multa.
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Pitar continuadamente a otro conductor: 80 euros de multa.
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Cambiarse de carril para evitar adelantamiento: Tipificado como Conducción Temeraria.
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Frenar y bloquear a otros vehículos: Tipificado como Conducción Temeraria.
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No dejarse adelantar: 200 euros de multa.
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No mantener la distancia de seguridad: 200 euros de multa.
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Ocasionar lesiones a otros conductores: Tipificadas como delito, hasta 600 euros más indemnización.
Medidas para reducir la conducta agresiva al volante
Si bien las multas a los conductores es una medida para disuadir de la agresividad en la conducción. También existen formas preventivas que ayudan a combatir este problema. Como son:
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Los cursos de conducción en los que se proporcione una formación que incida en este punto.
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Las charlas con víctimas de accidentes, en las que los conductores comprueben de primera mano lo peligroso que es dejase llevar por la agresividad y realizar una conducción temeraria.
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Retirada de puntos en el carnet de conducir aun si no se ha llegado a cometer una infracción concreta.
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Ir acompañado en el coche de personas que te transmitan tranquilidad, la gran mayoría asegura comportarse de mejor manera cuando va con sus hijos o cónyuge.
La conducta agresiva es un problema, pero aún más cuando nos ponemos al volante de nuestro vehículo. Merece la pena dedicar un tiempo a averiguar si somos conductores agresivos y si llevamos a cabo una conducción temeraria. Todos los usuarios de la vía dependemos de las conductas de los demás y en ocasiones el precio a pagar es muy caro.
Beatriz Martínez Larrucea – Departamento de Comunicación CEA
