Los siniestros mortales de vehículos pueden deberse a una infinidad de causas, pero la principal de ellas son las distracciones al volante al volante. En un instante, mirar el móvil, ajustar la radio o incluso conversar con los acompañantes puede desviar la atención necesaria para reaccionar a tiempo ante cualquier imprevisto en la carretera.
¿Cuál es la distracción más frecuente?
El uso del teléfono móvil es, con diferencia, la distracción más común. Acciones como marcar un número, responder a un mensaje de WhatsApp o realizar una llamada son prácticas habituales entre los conductores.
¿Qué ocurre cuando te distraes?
Las distracciones al volante no solo afectan a la capacidad de reacción ante posibles imprevistos, sino también en la percepción del entorno. Las distracciones al volante son el primer factor concurrente en los siniestros mortales de tráfico.
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Las distracciones causan el 30% de los siniestros viales.
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Después de un minuto y medio hablando por teléfono (aunque sea con el manos libres) el conductor no percibe el 40% de las señales y obstáculos de la vía.
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Tras una llamada, el ritmo cardíaco del conductor se acelera y el tiempo de reacción aumenta hasta en dos segundos.
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Se pierde la capacidad de poder mantener una velocidad constante y de respetar las distancias de seguridad.
El tipo de accidente más frecuente debido a las distracciones es la salida del vehículo de la vía, junto con el choque con el vehículo precedente y/o atropello de peatones.
¿Cuánto es la multa por distracción al volante?
Las distracciones al volante, como usar el móvil, manipular dispositivos o comer mientras se conduce, están estrictamente sancionadas debido a su impacto en los siniestros viales. La multa por este tipo de infracciones puede alcanzara 200 euros y conlleva la pérdida de 3 a 6 puntos en el carnet de conducir dependiendo de la gravedad de la infracción.
¿Cómo afecta la fatiga a la conducción?
La fatiga afecta directamente a la seguridad vial y, por consecuente, es otro de los principales causantes de accidentes por colisiones. Algunos de los efectos más comunes de la fatiga en la conducción son:
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Aumenta el número de distracciones al volante.
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Disminuye la capacidad de toma de decisiones rápidas.
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Disminuye la atención que el conductor presta al entorno y a las señales de tráfico.
Consejos para evitar distracciones al volante
Evitar un accidente de tráfico está en nuestras manos, y en muchas ocasiones basta con evitar aquellos factores que nos van a distraer de la conducción.
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Desactiva el móvil o ponlo en modo avión, así evitamos la tentación de revisar constantemente las posibles notificaciones que recibamos.
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Descansa bien antes de conducir y haz paradas en viajes largos. En los trayectos largos, lo recomendable es hacer paradas cada dos horas o 200 kilómetros para evitar la fatiga.
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Evita comer o beber mientras conduces. Aunque parezca inofensivo, comer o beber al volante también pueden suponer descuidos.
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Planifica la ruta antes de salir para evitar distracciones como consultar el GPS mientras conduces.
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Mantén la atención en la carretera y limita interacciones innecesarias con pasajeros o distraerte buscando objetos en el coche.
Conducir exige una concentración total, y cualquier distracción puede tener consecuencias graves o, incluso, irreversibles. Desde CEA, insistimos en que mantener la concentración y reducir las distracciones al volante es fundamental para proteger tu vida y la de los demás usuarios de la vía.
Mar López Monzón - Departamento Comunicación CEA